Por Jairo
Vargas
Diario Público.es,
8/05/2013.
"Elegimos Bankia como
objetivo porque hay que hacer leña del árbol caído. Ha sido rescatada y cada
español ha puesto mil euros para ello. Todos, no sólo desahuciados y
preferentistas, somos afectados de Bankia". Así explican desde GILA , uno de los
colectivos que promueve el llamado Toque a Bankia.
GILA actúa sobre todo en el
madrileño barrio de Lavapiés. Surgió al calor del 15-M y representa al fantasma
del humorista homónimo. Según explican, esta es una nueva acción
dirigida a paralizar la actividad habitual en las oficinas de la
entidad a través de lo que ellos denominan "cansinismo": una serie de
acciones coordinadas a través de Internet que se materializarán el próximo
jueves con largas colas de usuarios que pasarán por su sucursal para actualizar
su libreta, abrir una cuenta para cerrarla a la media hora, pedir información
sobre productos financieros, donar una céntimo a una ONG o, simplemente, fingir
una lipotimia en la puerta.
Precisamente el jueves se cumple
un año de la nacionalización del Banco Financiero y de Ahorros (BFA) ,
matriz de Bankia. Este proceso, por el que el Estado pasó a controlar el 100%
de BFA y, con ello, el 45% de Bankia, bien podría ser la crónica de una
quiebra anunciada que todo el mundo, desde los políticos que se
sentaban en su consejo de administración hasta el propio Banco de España- trató
de ocultar hasta que no hubo más remedio que recurrir al dinero público para tapar
los agujeros contables que sumaban un montante de 10.444 millones de euros,
según cifró el Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (FROB) en diciembre
de 2012.
Un año después, el 15-M no ceja
en su empeño de señalar a los culpables de la crisis financiera. "No somos
mercancías en manos de políticos y banqueros" fue uno de los lemas más repetidos
hace casi dos años, cuando cientos de miles de personas tomaron las plazas para
exigir una democracia más participativa en lugar de la actual, supeditada a
intereses financieros que están llevando a los ciudadanos a sufrir el mayor
retroceso en derechos sociales desde tiempos inmemoriales.
Por ello, desde febrero, a través
de una herramienta web desarrollada por Hacktivistas, GILA, junto a otros
colectivos abrió, un documento de texto editable por cualquier interesado para
que, con la premisa de actuar contra Bankia, se fueran poniendo ideas en común.
"La gente comenzó a escribir lo que quería. Muchos colectivos hicieron
distintas reivindicaciones y todos estábamos de acuerdo con ellas".
El objetivo, más allá de señalar
el caso de Bankia como el ejemplo de lo que no tiene que ser una banca pública,
se resume en seis exigencias: paralización total de los desahucios
y dación en pago retroactiva; destinar todas las viviendas de
Bankia -incluidas las destinadas al banco malo- a formar una parque de alquiler
social; recuperación de las participaciones preferentes y una
auditoría ciudadana de la deuda de Bankia para, con lo recuperado por
considerarlo deuda odiosa, destinar fondos a partidas de gasto social
recortados, como sanidad o educación.
Por último, el más grande de los
retos: Nacionalización completa de la entidad, pasando su
control íntegro a manos del Estado y "estableciendo mecanismos de
transparencia, participación del 99% y democracia directa en su consejo de
administración", explican en la web de la convocatoria.
A esta iniciativa se han sumado
varios colectivos que ya se las habían visto con Bankia previamente. Adicae , la PAH, Democracia Real Ya e
incluso trabajadores de Iberia secundarán esta iniciativa que busca paralizar
Bankia sin recurrir a ningún tipo de violencia ni actividades
fuera de la legalidad. De hecho, lo bueno de esta acción, indican desde GILA,
es que puede participar cualquiera que lo deseé sin riesgo de identificación o
sanción por participar en una manifestación no autorizada, ya que sólo
ejercerán "derechos básicos de los clientes", desde la apertura hasta
el cierre de las oficinas, indican.
Razones no faltan para darle un
toque a lo que se denominó la mayor caja de ahorros de España, pero que poco
después se descubrió que era una burbuja más grande incluso que la
inmobiliaria. "Las manifestaciones se nos quedaban cortas. Son muy
importantes pero no nos sirven para lograr los objetivos", explica un
miembro de GILA a Público, quien añade que no se trata de una sola
cita, sino que puede ser permanente en el tiempo hasta lograr sus objetivos.
"No quedará ahí la cosa. No
nos centramos sólo en Madrid, sino que se distribuirá allá donde halla
sucursales, incluso en Miami tenemos constancia de que se practicará. Tenemos
respuestas que nos dicen que la gente se está organizando en Jerez, Ciudad
Real, Valencia, ... en muchos sitios", enumeran.
Uno de los motivos que salta a la
vista para que colectivos ciudadanos actúen contra esta entidad son los
desahucios. En repetidas ocasiones, desde la Plataforma de Afectados por la
Hipoteca (PAH), que apoya esta iniciativa, se ha dicho que Bankia es el banco
que más desahucios ejecuta, al menos en la Comunidad de Madrid, cifrándolos
entre un 70% y un 80% del total. Un portavoz de la entidad asegura que no hay
datos que atestigüen esa afirmación y que desde 2011 han concedido más de 4.000
daciones en pago y 80.000 adecuaciones a los cambios en la situación económica
de las familias desde el 2009.
Sin embargo, desde colectivos
como la PAH o la Asamblea de Vivienda, denuncian que Bankia continúa
desahuciando a familias mientras es propietaria de un gran número de viviendas
vacías. A esto hay que sumarle varias inyecciones de capital público
que suman alrededor de 30.000 millones de dinero público entre inyecciones del
FROB y tras el rescate financiero que sobrevino después del desfalco de
sus cuentas. Ocupaciones como las del domingo pasado en Catalunya, donde activistas antidesahucio irrumpieron en 12 sucursales para
exigir renegociaciones para afectados, ponen sobre la mesa el malestar
ciudadano. En Madrid, varios afectados por la hipoteca organizaron lo que se
conocío como Acampada Bankia . Durante más de cien días, la madrileña plaza
de Celenque, donde Caja Madrid tiene varias de sus oficinas, fue ocupada por
desahuciados demandando negociar con la entidad su situación. Por eso, desde la
PAH no descartan continuar con estos "toques" y no sólo contra
Bankia.
El fenómeno de las
participaciones preferentes es otro de los comportamientos más sangrantes que
se achacan. Aunque no es exclusivo de la entidad, la Asociación de Usuarios de
Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) estima en 6.000 los millones que, de momento, han perdido los
clientes de Bankia que firmaron los contratos, en muchos casos sin saber qué
firmaban. Adicae ya interpuso una demanda conjunta que agrupaba a 300
preferentistas, todos clientes de Caja Madrid. Desde Bankia matizan que en
ninguna de las sentencias al respecto se habla de estafa y que ha establecido
un arbitraje al que ya se han acogido más de 29.000 afectados. Coinciden en la
cifra, 6.000 millones, pero matizan que no es dinero perdido, sino que es el
montante que Bankia emitió en preferentes y otros derivados, una suma que
deberá ser estudiada en cada caso.
Pero 29.000 afectados son muchos.
Más aún, aclaran desde GILA, teniendo en cuenta que se concedieron sobre todo
cuando aún eran cajas de ahorro, entes públicos "con gente del PP, PSOE,
IU y sindicatos en su junta directiva".
El 18 de julio del 2011, Rodrigo
Rato hacía sonar la campana con la que Bankia salía a bolsa . Una salida muy cuestionada, casi
obligada por el Gobierno, que también presionó para la fisión de las cajas con
más activos tóxicos, ya mayoría procedentes de la especulación inmobiliaria
(Caja Madrid y Bancaja las más notables). El resultado fue un banco
malo previo al Sareb con unos activos tóxicos por valor de más de 40.000 millones de euros.
Sin embargo este dato no
trascendió para posibilitar la salida a bolsa de la entidad, algo que, a
posteriori, ha costado al país un rescate bancario . Rodrigo Rato dimitió el día de la
nacionalización y fue Goirigolzarri, procedentes del BBVA, que actualmente
lleva las riendas.
Tras ser admitidas a trámite
varias querellas por falsedad contable y estafa mercantil
contra esta operación, entre ellas la de la plataforma ciudadana 15-MpaRato, tanto el propio Rato
como toda la junta directiva fue imputada en un proceso que aún continúa
abierto. Sin embargo, eso no ha impedido al exvicepresidente segundo del
gobierno de Aznar y exdirector general del FMI fichar por Telefónica como consejero asesor para Latinoamérica
y Europa.
Por todo ello, desde el 15-M
llaman a cualquier ciudadano a formar largas colas en la puerta de las
sucursales, porque como explican los miembros de GILA, "somos
anticapitalistas, pero de forma graciosa".
Desde Bankia han asegurado a Público
que no entran a valorar este tipo de iniciativas y que esperan que el
jueves sea un día de "normalidad".
Disponible en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario