Por Jesús García / Lluís
Pellicer
Diario El País (Cataluña),
23/12/2013.
Un juez de Mataró ha citado a
declarar, como imputados, a siete exdirectivos de Caixa
Laietana por la comercialización de participaciones preferentes. El
exdirector general Josep Ibern; su antecesor en el cargo, Pere Antoni de Dòria,
y otros cinco excargos tendrán que declarar como imputados por la venta de un
producto de riesgo que ha arruinado a miles de familias. El titular del juzgado
de instrucción 3 de Mataró ha admitido a trámite la querella por estafa
interpuesta por una de las familias avanzadas.
El auto judicial, que ayer avanzó
el diario Ara, subraya que hay indicios de delito y decide abrir
diligencias de investigación. El juez ordena a Caixa Laietana —hoy integrada
dentro de Bankia— que aporte “toda la documentación que tenga relación con la
comercialización de participaciones preferentes” y “deuda subordinada”, otro
producto de riesgo. Entre otros documentos, el juzgado solicita “circulares o
instrucciones impartidas a las sucursales, fichas del producto, boletines de
suscripción” y “trípticos informativos”.
El juez ha pedido a la Audiencia
Nacional que remita documentación sobre la investigación a entidades bancarias
por este asunto para decidir si debe inhibirse en su favor. Además de Ibern y
De Dòria, deberán declarar como imputados Alberto Carazo, Álvaro Canosa, Ernest
Mestre, Marc Zaragoza y Marcos Funez.
La venta de preferentes de Caixa
Laietana se cebó sobre todo con los ciudadanos de la comarca del Maresme y, en
especial, de Mataró, donde la entidad tenía su sede social. El Ayuntamiento de
la ciudad calcula que solo allí hay 15.000 afectados, lo cual supone al menos
el 12% de toda la población de la ciudad. El consistorio incluso tuvo que poner
en marcha un servicio de atención psicológica para los afectados. Las
plataformas que los defienden denuncian que no fueron avisados del peligro que
corrían sus ahorros porque se les reiteró que era un producto seguro.
La excúpula de Caixa Laietana ya
acudió a la comisión de cajas del Parlament. Allí, el diputado Pere Aragonès
(ERC) recordó a Josep Ibern que se ha tenido que crear un juzgado en Mataró
para atender la avalancha de casos. Ibern rechazó toda responsabilidad en la
venta de preferentes. “Ya le aseguro yo que no hacíamos nada diferente de lo
que hacían los otros”, se excusó, y agregó que en 2009, cuando la
comercialización era de su “responsabilidad” los clientes sí pasaban “los test
convenientes”. En la comisión, además, Ibern sostuvo que había adquirido 59.000
euros en participaciones preferentes. “Yo y mi familia. Y no me las he
vendido”, puntualizó.
Bankia, hoy nacionalizada, acumula
ya varias sentencias por la comercialización de productos híbridos. En marzo el
juez sentenció que la entidad devolviera 33.000 euros a una mujer de Mataró que
compró obligaciones subordinadas porque la clienta que firmó la compra y el
canje posterior no recibió información adecuada ni “veraz” sobre los riesgos
del producto.
Los afectados lamentan, además,
que Bankia recurra sentencias como una del pasado mes de octubre que daba la
razón a una madre con tres hijos, una de ellas afectada por síndrome de Dawn.
La entidad, según la sentencia, debía devolver 30.000 euros a los afectados
porque la madre y sus hijas creían que estaban contratando “una imposición a
plazo, sin riesgo de pérdida de capital”. La decisión de Bankia de recurrir
indignó al Colectivo Ronda, el despacho de abogados que asesora a la familia,
que denuncia que Bankia “recurre sistemáticamente cualquier” decisión judicial
“contraria a sus intereses”.
Disponible en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario