Por Luis Doncel
Diario El País, 8/07/2013.
La lucha contra el paro juvenil y
el apoyo a las pequeñas y medianas empresas se ha colocado en el centro de las
políticas europeas. Pero los esfuerzos conjuntos de los Gobiernos y las
instituciones europeas no dan, por ahora, el resultado esperado. Mario Draghi,
presidente del presidente del Banco Central Europeo (BCE), dio este
lunes algunos datos que muestran hasta qué punto las pymes de algunos países lo
están pasando mucho peor que las de otros. “Las diferencias en el acceso al
crédito es un asunto que afecta a la inversión y al crecimiento. En España, los
tipos de interés para los créditos pequeños son un 2,3% más altos que los que
tienen que pagar los préstamos más grandes. En Francia, por ejemplo, esa
diferencia es de solo el 1%”, dijo el máximo responsable del BCE en el
Parlamento Europeo. Son las pymes las que sufren esta fragmentación, dijo
Draghi, al tiempo que alertaba de que la institución que preside no puede hacer
nada para remediarlo hasta que el año que viene asuma el papel de supervisor
único de la banca europea.
No fue la única referencia a
España que el guardián del euro hizo en su comparecencia en el comité de
Asuntos Económicos de la Eurocámara. Draghi señaló a cuatro países que se han
visto obligados a poner en marcha políticas económicas de prudencia por
diversos problemas que les obligaban a tomar esa decisión: además de España,
citó a Italia, Holanda y Reino Unido. “El Banco de España se ha enfrentado a la
necesidad de asegurar que los progresos en el fortalecimiento de la banca
continúan. Para ello, ha recomendado a las instituciones de crédito que limiten
la distribución de dividendos y les aseguren un nivel de capitalización
adecuado”, señaló el italiano.
En el horizonte inmediato, Draghi
reconoce una cierta mejora en las perspectivas económicas. Pero estas señales
de optimismo son muy débiles y susceptibles de desaparecer por riesgos
latentes. Entre otros, que la demanda —tanto interna como global— sea más débil
de lo esperado o una hipotética parálisis en las reformas estructurales en los
países del euro. Para apuntalar esta incipiente mejora, el jefe del BCE apuesta
por mantener los tipos de interés en el 0.5% actual durante un largo periodo de
tiempo, o incluso bajarlos más.
Disponible en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario